Apitiké

Apitiké
Nuevo servicio para escritores

domingo, junio 18, 2006

Carne con tomate

No quiero ser infiel al espíritu con el que empecé este blog, reflejado en su propio título: decir lo mismo una cosa que otra. Una de esas "otras cosas" que estoy olvidando últimamente son las recetas de cocina. Así que hoy voy a daros la receta de lo que he hecho de comer para llevarme mañana a la oficina, metidito en un tapper y dispuesto a ser calentado en el microondas.

El plato en cuestión es carne con tomate. En primer lugar se pica una cebolla de buen tamaño y dos o tres dientes de ajo y se ponen a rehogar en una sartén grande, con un buen chorro de aceite de oliva virgen (yo es que no cocino con otro). Cuando la cebolla está pochada, se añade medio kilo de carne de ternera cortada en daditos, ni muy gruesos ni muy pequeños. En este punto, se añade un poco de sal. Se van dando vueltas a fuego medio o medio-lento, para que la carne se haga por dentro. Lo mantenemos a ese fuego como unos veinte minutos (el tiempo es aproximado, lo mejor es estar pendiente) removiendo alguna que otra vez. Cuando vemos que la carne ya está algo cocinada, añadimos champiñones en láminas, unos doscientos gramos. Yo esta vez he echado una lata, pero es mejor echar champiñones naturales, hay una diferencia enorme. El problema con los naturales es que sueltan mucha agua, pero o bien se deja reducir el líquido, o se escurre un poco.

Cuando los champiñones ya están también hechos, añadimos el contenido de una lata de un kilo de tomate triturado (digo un kilo, pero las latas suelen ser de 800 grs.). Un poco más de sal, un puñado de comino en grano, cuatro o cinco cucharadas de azúcar (para quitar acidez) y a remover todo, que se mezcle bien. Ahora lo dejamos a fuego medio-lento, moviendo de vez en cuando, unos cuarenta minutos. Y ya está.

El resultado es el de la foto de al lado, y digo exactamente ése, porque la foto se la hice yo, de ahí que esté todo salpicado y manchado y no sea una de esas fotos de libro de cocina en la que para ilustrar la carne con tomate pondrían, qué se yo, mermelada de tomate con trozos de cartón y una capa de clara de huevo para que brille.

Por cierto, esta receta no sería nada del agrado de Julian Barnes, el autor de El perfeccionista en la cocina, libro del que hablé un poco, y es que éste hombre espera encontrar en las recetas tiempos y medidas exactas. Tal vez yo no sea un perfeccionista... pero me lo paso bien.

Ah, y no me voy a comer esa sartenaza, claro está, saco un poco para el curro y congelo el resto en dos tappers, y ya tengo comida para dos días más. Ahora quizá cueza algunos macarrones y se los mezcle ya en el sito de comer. Creo que estará bueno.

No hay comentarios: